Las grandes ilusiones en la magia infantil

[Pulgas]

Me alegra mucho ver que el debate cobra vida.
No os preocupéis si saltamos de un lado para otro, de todo se aprende.
Magnífico el espectáculo de Serjo. Es uno de lso que tenía reservado para el último punto (Enlaces y aportaciones de interés (vídeos y algunas críticas), pero podemos hablar de él en cualquier momento.
Al final, cuando las ideas estén más claras, cuando los aspectos teóricos los contrlemos un poco más, mi sugerencia es que hagamos la crítica de algunos vídeos y que, sobre ellos, aunemos criterios (o no) y debatamos.
De momento, me quedo con un pensamiento que me surge al leer los comentarios anteriores: la barera entre lo que es una Gran Ilusión y lo que no lo es no está bien definida, no es clara. El ejemplo del twister nos ilustra al respecto.

[Pulgas]

Las grandes ilusiones atraen de forma especial el interés del público. Los niños no podían ser una excepción. Es más, a los niños les fascinan.
Sin embargo, la mayoría de las presentaciones que se hacen de ellas no están orientadas para público pequeño. Lamentablemente, y una vez más, la magia infantil se convierte en la “hermana pobre” del ilusionismo y ha quedado relegada, en la mayor parte de los casos, para los adultos (o para público familiar, en el mejor de los casos).
Pero, ¿cuál es la clave de esa devoción hacia este tipo de juego?
Quizás la respuesta podamos encontrarla en que rompe su lógica. El hecho de trabajar con volúmenes grandes, aleja todo tipo de sospecha acerca de lo que él se espera: un tigre o una ayudante no caben en las mangas, como con frecuencia apuntan los peques (aunque trabajemos sin ellas); romper las leyes físicas (que un cuerpo se fragmente) no es algo que se pueda sacar de un bolsillo; que sea una persona la que se desvanezca no es igual que hacer desaparecer una pelotita o un pañuelo.
El mago infantil, que no ignora lo que comento, debe ahora hacer un esfuerzo para llevar a su terreno la expectación que, por si, crea el aparato. Debemos reflexionar acerca de la línea argumental que le damos, debemos estudiar la forma de presentación, el contenido argumental, aplicándolo a la mentalidad infantil.
Los cuentos infantiles están llenos de Grandes Ilusiones: el lobo se transforma en abuelita de Caperucita; el Flautista de Hamelín hace desaparecer a los niños; la Bella Durmiente yace en un prolongado letargo, hasta que el Príncipe la despierta (¿Por qué no una suspensión durante el sueño?).
Si somos capaces de trasladar ese acervo infantil, esos elementos que le son propios, a nuestros espectáculos, el atractivo de las Grandes Ilusiones se multiplicará por mucho y nuestros espectáculos saldrán firmemente fortalecidos.
Atravesar a alguien con espadas, cuando permanece oculto en un cesto, es atractivo por naturaleza. Imaginarse que es Alí Babá, huyendo de los ladrones que pretenden haberlo encontrado, es reforzar una idea que le es propia al peque, con la que ha crecido y ha fabulado, que la vive de una manera especial.
Así pues, donde las Grandes Ilusiones crean una expectativa de un 8 para los niños, nosotros las podemos subir al 9,5 o al 10 modificando su planteamiento y reforzando el núcleo de interés del pequeño.

[LOU LESS]

Saludos.

Cómo hay carta libre para saltar de un lado a otro, voy a mencionar un ej. más.

La caja levitación, idea original de Alí Bongo. Con un aire infantil y divertido, se le da un toque que entraría perfectamente en G.I. infantiles.

Una simple caja de cartón, es convertida en una G.I. , incluso con la versión normal-estandar para espectáculos familiares, para mi gusto queda un poco pobre.
Pero con un toque de humor entraría perfectamente en lo que estamos buscando.

Ayer puse el ej. de Twister, con aparato es G.I., con una simple caja de cartón en la cabeza o bolsa creo que no es más que un Nº de escena.

Lou Less.

[Pulgas]

Vamos a echar un vistazo a qué es lo que necesitamos si queremos trabajar las Grandes Ilusiones. Los puntos reseñados son generalidades. Las grandes ilusiones no están uniformadas y sus necesidades dependen de cuál utilicemos y del uso que le demos.

El primer punto, y bastante importante, dinero para adquirirlas.

Condiciones técnicas.

• Un local donde almacenarlas. Si se trata de ilusiones voluminosas, necesitaremos un lugar para su almacenamiento.
• Un vehículo con capacidad suficiente para su transporte. En un coche pequeño algunas de ellas no nos cabrán.
• Personal de ayuda para carga, descarga y montaje. Dependerá de cuál usemos, pero muchas son pesadas y necesitan más de una persona para su montaje.
• Una sala grande para ensayos.
• Un partener.
• Un lugar adecuado para la función. Muchos de los aparatos son muy exigentes en cuanto a ángulos y espacio.
• Iluminación adecuada. En general una gran ilusión viste más con la iluminación pertinente.

Otras condiciones que, en mi criterio, resultan imprescindibles para hacer grandes ilusiones ante público infantil serían:

• Una presentación definida y adaptada a la edad del público.
• Una estructura del espectáculo que nos lleve a ellas sin que desentone, sin que parezca un añadido para meter una “gran ilusión”. Es decir, la coherencia total de nuestra gala.

[Pulgas]

El formato tradicional de presentación de las Grandes Ilusiones no es propio de la infancia. Tendremos que hacer un esfuerzo de imaginación para reconvertir los aparatos en algo atractivo, apto para menores, simpático y divertido, o visual y entretenido, o… según sean nuestras preferencias.
A partir de ahora se acepta toda idea que cumpla esos requisitos. Es decir, os propongo jugar a:
Tengo una Gran Ilusión, la descompongo, la adapto al menor y creo una rutina merecedora del público al que va dirigida.

Para romper el hielo, pongo un ejemplo.

Baúl de escape.
Trabajo con la idea de Alí Babá y los cuarenta ladrones. Alí se encuentra en la cueva. En escena hay varios cofres llenos de tesoros. Los ladrones entran. Alí se esconde dentro de uno de los baúles. Los ladrones, que detectan algo extraño, empiezan a buscar al intruso. Se acercan al baúl donde se ha escondido el protagonista (crece la emoción: los niños piensan que le van a pillar). No hay nada, el baúl está vacío. Alí Babá se ha salvado.

Esta es la línea en la que me gustaría que trabajásemos: el estudiar cómo podemos “deconstruir” las Grandes Ilusiones para adaptarlas a nuestro público.
¿Quién se anima a jugar un rato con la imaginación?

[LOU LESS]

Saludos.

Pulgas, una G.I. muy conocida es la metamorfosis, el juego nos da mucho margen de actuación interactuado con personajes de cuentos infantiles.

Por ejemplo: un malvado personaje, y una joven doncella enamorada de un príncipe.
Se crea una trama con varios juegos, y el final es la metamorfosis, el malvado encierra a la doncella, ésta aparece arriba de la caja, y en el interior aparece el principe, el malo simplemente ha desaparecido.
Durante la actuación siempre puede aparecer una foto, dibujo o descripción del principe. Así cuando aparece al final, los niños lo identifican a la 1ª.

Creo que puede ser un ejemplo de G.I. en una temática infantil, nada de violencia y final feliz. Los personajes tienen mucho juego.

Lou Less.

[Pulgas]

Por si a alguien le apetece comentar cosillas.
Aquí tenemos un ejemplo de la Voodoo box con paraguas y comedia.

http://www.youtube.com/watch?v=buBXwR7ONzc

[Pulgas]

No terminan de convencerme ni la ejecución ni la realización, pero aquí tenemos otro ejemplo muy apto para peques.


http://www.youtube.com/watch?v=Ek57NmfEqQ8

[magomarcos]

Os dejo una foto. Version infantil de una suspension de espada, en la foto no esta pero en la parte de los pies, la camilla estaa suspendida con una zanahoria.

En escenario es mas facil el uso de grandes ilusiones, principalmente por su volumen y traslado, en fiestas infantiles no es muy bien paga, yo solo la uso en el show de horas.

Estuve con ganas de hacer la suspension en la alfombra, pero en fiestas infantiles ( aunque la venden para eso) creo que hay muchos angulos a cubrir.