"Quiero ser como..."

[S. Alexander]

Hola, vengo a proponer un debate sobre el que espero aprender mucho. Lleva tiempo comiéndome la cabeza, así que os lo dejo aquí para que os la coma a vosotros (la cabeeezaaaa ) :

El hecho de seguir a un mago en concreto, de tenerle como modelo a seguir, ¿limita tu magia? Es decir, uno puede tener como mago modelo a Juan Tamariz, sin imitarle, con tu propio estilo parecido al de él: con tus propias bromas y tus propios gestos, pero realizándolos del mismo modo, con el mismo ímpetu, con la misma gracia y salero. Pero esto limita tu propia magia y tu propio personaje, ya que aspiras a ser "como él", no "más que él". No aspiras a superarle, sino que quieres ser como él es, tan gracioso como es, tan mágico como es, tan... tan... tan...

Aquí dejo mi opinión... ¡suenan las campanas, comienza el debate!

[ignoto]

Yo aspiro a ser como el creador de la revista Playboy. A vivir como él y, llegado el caso, a morir como él.

Ese si que es un ídolo.

[Coloclom]

a mi eso es algo que no me va, porque como tú has dicho, me limitaría.

Está claro que hay que buscar espejos en los que reflejarse, al menos, un poquito; pero pararte frente al televisor a estudiar a un mago, para defenir tu propio "yo" me parece equivocado, y además, tendrías que ser muy buen actor.

siempre que he intentado copiar algo de otros magos he intentado que ello se limitara a sus fórmulas de estudio, de práctica, a sus estudios para la puesta en escena (pero porque me pareciesen correctas y mejores que otras ya conocidas); sino, siempre busco lo contrario, ser diferente.

Fijate en Rubiales, no le hace muy grande lo lejos que está del mago convencional? umm, quizá no me expreso bien, pero quiero decir, los niños tienen una imagen en su cabeza sobre cómo debería ser un mago, Rubiales dista mucho de esa imagen, pero luego ves su magia, y te pega más de lleno aún.

Creo que es preferible verse diferente a entrar en lo supuesto.

Si hay cosas en las que absorvo todo lo que puedo sobre ciertos magos, pero porque por material o por lo que sea no puedo evitarlo (tampoco quiero); me refiero, a que si tomas como maestros libros de Ascanio, Canuto, Giobbi, Tamariz,... que ya desde el principio te crean una base mágica, que implica conocimientos teóricos propios de estos magos, es lógico y normal que adquieras sus teorías como propias, que luego, sean correctas o equivocadas, te costará un poquito desvincularte de ellas.

[magikcrash]

Yo iba a decir que yo me conformo con ser yo mismo y no como alguien y trabajar en un restaurante o pub algunos fines de semana y con los niños el resto de dias... Pero creo que yo tambien quiero ser como el abuelo del PlayBoy, eso si que es vida ! ! Ese si que sabe hacer aparecer conejos.. xD jajajajajaja

[S. Alexander]

x'DDDD Me parto

Este hilo ha surgido de una reciente presentación y quería compartirlo con vosotros, porque ha habido gente en este mismo foro a los que he pedido ayuda para iniciarme en ciertas ramas y siempre me han dicho algo así como: Pues este libro es de tal autor, y si quieres ser la sombra de tal autor vas a tener que esforzarte mucho, aunque como tal autor sólo hay uno.
Es decir, que parecía que sólo aspiraban a "ser como". Por eso me preocupaba que la mayoría de los magos de este foro se conformasen con imitar a otro o seguirle.

Yo también quiero ser como el de la mansión Playboy

[Iban]

Ya vengo yo a decir las tonterías, no os preocupéis.

Es imposible no empezar estudiando a otros. Pero también es difícil parecerse a alguien de una manera... aceptable. Lo que suele suceder es que, no tenemos un espejo en el que nos reflejamos, sino trocitos de muchos espejos: un poquito de éste, un poquito de aquél otro... Y somos como un caleidoscopio mágico. Hecho de muchos otros trozos.

Cogemos retazos de aquí y de allá, y los vamos juntando. Elegimos y los vamos pegando. Cuando más pequeños sean esos trozos, y de más fuentes, más necesitaremos de aportación propia para... empastar la mezcla. Hasta que llega un momento en el que la propia mezcla esconde los trozos.

Imagínate como una vidriera: coges trozos de crital, de diferentes colores, y los vas juntando. La forma de ordenarlos depende de ti, y el dibujo final también. Partirás de placas de vídrio uniforme de las que has de coger lo que necesites, y juntarlo con plomo fundido para conseguir una imagen final. Si lo haces bien, cuando alguien vea esa vidriera, no verá trozos de cristal uno junto al otro, sino una escena completa, llena de colores.

Los cristales que tomas prestado son otros magos, el plomo es tu propia aportación, y el dibujo final es tu objetivo para convertirte en un mago de entidad propia. Todos tenemos cristales de los que partir. Algunos tenemos más o menos plomo dentro de nosotros, y sólo unos pocos son capaces de dibujar una escena final atractiva.

(Y el que me diga que no hay que coger nada de otros magos, que me lo explique despacito, porque no lo voy a entender).

[LOU LESS]

Saludos.

Hasta que nos forjamos un yo, siempre existe la influencia de otras personas, padres, hermanos, profesores, amigos, etc.
La figura del lider.
Esa figura es válida para la magia, el camino, sin un guía al que seguir, es largo.
Yo más que tener un mago al que seguir, creo que lo correcto sería si el mago elegido, es el correcto, es lo que buscamos.
Siempre como guía, no como objetivo, para más tarde forjarnos nuestra propia personalidad mágica.

En la variedad, la diversificación está parte del exito, si solo hay un referente, nos lo jugamos a una carta.

Las referencias son buenas, las imitaciones no.

Si te gusta un mago, puedes tratar de modificar sus conductas hacia tí, pero que nada de lo que hagas te pueda relacionar con él. Es decir, imitar pero sin que se sepa que es una copia.

LOU LESS.

[magobernal]

bueno,
yo creo que no te va a limitar la magia, ya que si hay un juego que tamariz no lo hace, te inventas tu propia charla (que sera paracida) y ya esta.
Ahora bien, NO puedes imitar SOLO a un mago, porque seras un clon de ese mago. esto lo se, porque en la academia a la que voy, antes, cada clase tenia a un mago como profe asignado, y claro, todos los de una misma clase, eran miniclones de su profe (hacian os mismos chistes, las mismas pausas, la misma charla..)
Como minimo, debes de inspirarte en varios magos (y aun asi, seguiras copiandoles los chistes en cada juego que te enseñen).

Yo cuando no sabia casi nada de magia, imitaba a tamariz en todo (incluso en los chistes que hace con los nombres), lo malo era que esa personalidad, no era mia, y derrepnte me ponia a dar gritos e incluso llegaba a imitar su voz.

yo creo que no se debe imitar a un solo mago

[S. Alexander]

Ya vengo yo a decir las tonterías, no os preocupéis.

Es imposible no empezar estudiando a otros. Pero también es difícil parecerse a alguien de una manera... aceptable. Lo que suele suceder es que, no tenemos un espejo en el que nos reflejamos, sino trocitos de muchos espejos: un poquito de éste, un poquito de aquél otro... Y somos como un caleidoscopio mágico. Hecho de muchos otros trozos.

Cogemos retazos de aquí y de allá, y los vamos juntando. Elegimos y los vamos pegando. Cuando más pequeños sean esos trozos, y de más fuentes, más necesitaremos de aportación propia para... empastar la mezcla. Hasta que llega un momento en el que la propia mezcla esconde los trozos.

Imagínate como una vidriera: coges trozos de crital, de diferentes colores, y los vas juntando. La forma de ordenarlos depende de ti, y el dibujo final también. Partirás de placas de vídrio uniforme de las que has de coger lo que necesites, y juntarlo con plomo fundido para conseguir una imagen final. Si lo haces bien, cuando alguien vea esa vidriera, no verá trozos de cristal uno junto al otro, sino una escena completa, llena de colores.

Los cristales que tomas prestado son otros magos, el plomo es tu propia aportación, y el dibujo final es tu objetivo para convertirte en un mago de entidad propia. Todos tenemos cristales de los que partir. Algunos tenemos más o menos plomo dentro de nosotros, y sólo unos pocos son capaces de dibujar una escena final atractiva.

(Y el que me diga que no hay que coger nada de otros magos, que me lo explique despacito, porque no lo voy a entender).

Señoras y señores, la Alegoría de la Vidriera... ¡Iban, empiezas a parecerte a mi querido Platón!

[Jimmy MX]

No se debe imitar a nadie en absoluto, todos y cada uno de nosotros somos únicos, y tenemos nuestra propia personalidad y caracteristicas que nos diferencian. Si obtienes un estilo propio verás que es más facil y mejor.